30/07/2018

Podrá acoger entre 600 y 700 personas

Magdalena Valerio visita el nuevo centro de acogida y atención temporal de Inmigrantes de Chiclana (Cádiz)

Tema:

  • Ministra
  • El centro tendrá capacidad para acoger a alrededor de 600 personas, que recibirán atención humanitaria y sanitaria una vez hayan sido identificadas por la policía.
  • La ministra apela a la prudencia y responsabilidad del resto de fuerzas políticas con la crisis migratoria, y recuerda la obligación del Estado de respetar los derechos humanos
  • Valerio recuerda que la política migratoria exige “que todos los países de Europa se impliquen”

La ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Magdalena Valerio, ha visitado hoy, junto al delegado del Gobierno en Andalucía, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, el Centro de Atención a Inmigrantes Campano, en Chiclana (Cádiz). En este Centro se prestará desde hoy atención especializada a inmigrantes en la Fase de acogida, estabilización y derivación, una vez que ya han sido identificados por la Policía Nacional.

Valerio ha explicado, en declaraciones a los medios de comunicación, que en este centro, reconvertido en centro de acogida temporal, se van a poder alojar entre 600 y 700 personas inmigrantes que estarán ubicadas exclusivamente en la zona residencial y comedores, gestionada por Cruz Roja y donde permanecerán una media de 4 a 5 días. “Aquí van a tener un lugar dónde poder ser atendidas adecuadamente”, afirmó la ministra.

Este nuevo centro permitirá trasladar a los inmigrantes que se encuentran actualmente en los polideportivos de la zona (Cádiz, Algeciras y Jerez).

En relación al tema de la acogida de estas personas, Magdalena Valerio ha aprovechado para pedir a todas las fuerzas políticas “prudencia, sentido de Estado, de la responsabilidad y altura de miras”. “Es lo que espera la ciudadanía de a pie de cualquier líder político y que no genere discordia sino concordia”, remarcó.

Valerio ha destacado que en estos momentos el fenómeno de la inmigración requiere considerar cuatro aspectos. En primer lugar, que se trata de un asunto que pertenece a la historia de la humanidad y que es un “fenómeno imparable”, ya que existe “un efecto de huida de la pobreza, de la miseria y de las guerras”. Un fenómeno que, para que no se convierta en difícilmente controlable requiere, según la ministra, “apostar por invertir en los países de origen con programas al desarrollo”.

En segundo lugar, cumplir la ley; “tenemos una legislación que nos dice que hay que proteger las fronteras de este país y también estamos obligados a cumplirla”. En tercer lugar, el Gobierno apuesta por el establecimiento de flujos migratorios regularizados que permita a personas de otros países venir en contingentes controlados para ocupar ciertos trabajos que no se pueden cubrir por personas autóctonas. Y, por último, los flujos migratorios de “personas que vienen en situación irregular, con los que estamos obligados a respetar los derechos humanos y a darles una atención humanitaria. En esa situación nos encontramos ahora”, señaló.

Un fenómeno, el migratorio, para el que España necesita de la ayuda de Europa. “La política migratoria tiene que ser común, donde todos los países de Europa se impliquen”, remarcó la titular de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social,

El número de personas inmigrantes atendidas a pie de playa en lo que va de año, hasta el 25 de julio, se eleva a 22.082, cifra cercana a la registrada en todo el ejercicio 2017 que fue de 24.375 que ya superó en un 132% a la de 2016.